Día 23

04 El Pacto en el Monte Sinaí

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En Éxodo, Dios invita a los israelitas a establecer un pacto con ÉL y viene a vivir entre ellos en el Tabernáculo, pero Israel se rebela y arruina la relación.

Éxodo 19

Israel en el monte Sinaí

Éxo 19:1

Los israelitas en el Sinaí

Los israelitas llegaron al desierto de Sinaí a los tres meses de haber salido de Egipto.

Éxo 19:2 Después de partir de Refidín, se internaron en el desierto de Sinaí, y allí en el desierto acamparon, frente al monte,

Éxo 19:3 al cual subió Moisés para encontrarse con Dios. Y desde allí lo llamó el SEÑOR y le dijo: «Anúnciale esto al pueblo de Jacob; declárale esto al pueblo de Israel:

Éxo 19:4 “Ustedes son testigos de lo que hice con Egipto, y de que los he traído hacia mí como sobre alas de águila.

Éxo 19:5 Si ahora ustedes me son del todo obedientes, y cumplen mi pacto, serán mi propiedad exclusiva entre todas las naciones. Aunque toda la tierra me pertenece,

Éxo 19:6 ustedes serán para mí un reino de sacerdotes y una nación santa.” »Comunícales todo esto a los israelitas.»

Éxo 19:7 Moisés volvió y convocó a los ancianos del pueblo para exponerles todas estas palabras que el SEÑOR le había ordenado comunicarles,

Éxo 19:8 y todo el pueblo respondió a una sola voz: «Cumpliremos con todo lo que el SEÑOR nos ha ordenado.» Así que Moisés le llevó al SEÑOR la respuesta del pueblo,

Éxo 19:9 y el SEÑOR le dijo: —Voy a presentarme ante ti en medio de una densa nube, para que el pueblo me oiga hablar contigo y así tenga siempre confianza en ti. Moisés refirió al SEÑOR lo que el pueblo le había dicho,

Éxo 19:10 y el SEÑOR le dijo: —Ve y consagra al pueblo hoy y mañana. Diles que laven sus ropas

Éxo 19:11 y que se preparen para el tercer día, porque en ese mismo día yo descenderé sobre el monte Sinaí, a la vista de todo el pueblo.

Éxo 19:12 Pon un cerco alrededor del monte para que el pueblo no pase. Diles que no suban al monte, y que ni siquiera pongan un pie en él, pues cualquiera que lo toque será condenado a muerte.

Éxo 19:13 Sea hombre o animal, no quedará con vida. Quien se atreva a tocarlo, morirá a pedradas o a flechazos. Sólo podrán subir al monte cuando se oiga el toque largo de la trompeta.

Éxo 19:14 En cuanto Moisés bajó del monte, consagró al pueblo; ellos, por su parte, lavaron sus ropas.

Éxo 19:15 Luego Moisés les dijo: «Prepárense para el tercer día, y absténganse de relaciones sexuales.»

Éxo 19:16 En la madrugada del tercer día hubo truenos y relámpagos, y una densa nube se posó sobre el monte. Un toque muy fuerte de trompeta puso a temblar a todos los que estaban en el campamento.

Éxo 19:17 Entonces Moisés sacó del campamento al pueblo para que fuera a su encuentro con Dios, y ellos se detuvieron al pie del monte Sinaí.

Éxo 19:18 El monte estaba cubierto de humo, porque el SEÑOR había descendido sobre él en medio de fuego. Era tanto el humo que salía del monte, que parecía un horno; todo el monte se sacudía violentamente,

Éxo 19:19 y el sonido de la trompeta era cada vez más fuerte. Entonces habló Moisés, y Dios le respondió en el trueno.[a]

Éxo 19:20 El SEÑOR descendió a la cumbre del monte Sinaí, y desde allí llamó a Moisés para que subiera. Cuando Moisés llegó a la cumbre,

Éxo 19:21 el SEÑOR le dijo: —Baja y advierte al pueblo que no intenten ir más allá del cerco para verme, no sea que muchos de ellos pierdan la vida.

Éxo 19:22 Hasta los sacerdotes que se acercan a mí deben consagrarse; de lo contrario, yo arremeteré contra ellos.

Éxo 19:23 Moisés le dijo al SEÑOR: —El pueblo no puede subir al monte Sinaí, pues tú mismo nos has advertido: “Pon un cerco alrededor del monte, y conságramelo.”

Éxo 19:24 El SEÑOR le respondió: —Baja y dile a Aarón que suba contigo. Pero ni los sacerdotes ni el pueblo deben intentar subir adonde estoy, pues de lo contrario, yo arremeteré contra ellos.

Éxo 19:25 Moisés bajó y repitió eso mismo al pueblo.

Éxodo 20

Los Diez Mandamientos

Éxo 20:1

Los Diez Mandamientos

20:1-17—Dt 5:6-21

Dios habló, y dio a conocer todos estos mandamientos:

Éxo 20:2 «Yo soy el SEÑOR tu Dios. Yo te saqué de Egipto, del país donde eras esclavo.

Éxo 20:3 »No tengas otros dioses además de mí.[a]

Éxo 20:4 »No te hagas ningún ídolo, ni nada que guarde semejanza con lo que hay arriba en el cielo, ni con lo que hay abajo en la tierra, ni con lo que hay en las aguas debajo de la tierra.

Éxo 20:5 No te inclines delante de ellos ni los adores. Yo, el SEÑOR tu Dios, soy un Dios celoso. Cuando los padres son malvados y me odian, yo castigo a sus hijos hasta la tercera y cuarta generación.

Éxo 20:6 Por el contrario, cuando me aman y cumplen mis mandamientos, les muestro mi amor por mil generaciones.

Éxo 20:7 »No pronuncies el nombre del SEÑOR tu Dios a la ligera. Yo, el SEÑOR, no tendré por inocente a quien se atreva a pronunciar mi nombre a la ligera.

Éxo 20:8 »Acuérdate del sábado, para consagrarlo.

Éxo 20:9 Trabaja seis días, y haz en ellos todo lo que tengas que hacer,

Éxo 20:10 pero el día séptimo será un día de reposo para honrar al SEÑOR tu Dios. No hagas en ese día ningún trabajo, ni tampoco tu hijo, ni tu hija, ni tu esclavo, ni tu esclava, ni tus animales, ni tampoco los extranjeros que vivan en tus ciudades.[b]

Éxo 20:11 Acuérdate de que en seis días hizo el SEÑOR los cielos y la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos, y que descansó el séptimo día. Por eso el SEÑOR bendijo y consagró el día de reposo.

Éxo 20:12 »Honra a tu padre y a tu madre, para que disfrutes de una larga vida en la tierra que te da el SEÑOR tu Dios.

Éxo 20:13 »No mates.

Éxo 20:14 »No cometas adulterio.

Éxo 20:15 »No robes.

Éxo 20:16 »No des falso testimonio en contra de tu prójimo.

Éxo 20:17 »No codicies la casa de tu prójimo: No codicies su esposa, ni su esclavo, ni su esclava, ni su buey, ni su burro, ni nada que le pertenezca.»

Éxo 20:18

Reacción temerosa de los israelitas

Ante ese espectáculo de truenos y relámpagos, de sonidos de trompeta y de la montaña envuelta en humo, los israelitas temblaban de miedo y se mantenían a distancia.

Éxo 20:19 Así que le suplicaron a Moisés: —Háblanos tú, y te escucharemos. Si Dios nos habla, seguramente moriremos.

Éxo 20:20 —No tengan miedo —les respondió Moisés—. Dios ha venido a ponerlos a prueba, para que sientan temor de él y no pequen.

Éxo 20:21 Entonces Moisés se acercó a la densa oscuridad en la que estaba Dios, pero los israelitas se mantuvieron a distancia.

Leyes sobre altares

Éxo 20:22

El altar de piedra

El SEÑOR le ordenó a Moisés: «Diles lo siguiente a los israelitas: “Ustedes mismos han oído que les he hablado desde el cielo.

Éxo 20:23 No me ofendan; no se hagan dioses de plata o de oro, ni los adoren.

Éxo 20:24 Háganme un altar de tierra, y ofrézcanme sobre él sus holocaustos y sacrificios de comunión, sus ovejas y sus toros. Yo vendré al lugar donde les pida invocar mi nombre, y los bendeciré.

Éxo 20:25 Si me hacen un altar de piedra, no lo construyan con piedras labradas, pues las herramientas profanan la piedra.

Éxo 20:26 Y no le pongan escalones a mi altar, no sea que al subir se les vean los genitales.”

Éxodo 21

Leyes sobre esclavos

Éxo 21:1

Esclavos hebreos

21:2-6—Dt 15:12-18

»Éstas son las leyes que tú les expondrás:

Éxo 21:2 »Si alguien compra un esclavo hebreo, éste le servirá durante seis años, pero en el séptimo año recobrará su libertad sin pagar nada a cambio.

Éxo 21:3 »Si el esclavo llega soltero, soltero se irá. »Si llega casado, su esposa se irá con él.

Éxo 21:4 »Si el amo le da mujer al esclavo, como ella es propiedad del amo, serán también del amo los hijos o hijas que el esclavo tenga con ella. Así que el esclavo se irá solo.

Éxo 21:5 »Si el esclavo llega a declarar: “Yo no quiero recobrar mi libertad, pues les tengo cariño a mi amo, a mi mujer y a mis hijos”,

Éxo 21:6 el amo lo hará comparecer ante los jueces,[a] luego lo llevará a una puerta, o al marco de una puerta, y allí le horadará la oreja con un punzón. Así el esclavo se quedará de por vida con su amo.

Éxo 21:7 »Si alguien vende a su hija como esclava, la muchacha no se podrá ir como los esclavos varones.

Éxo 21:8 »Si el amo no toma a la muchacha como mujer por no ser ella de su agrado, deberá permitir que sea rescatada. Como la rechazó, no podrá vendérsela a ningún extranjero.

Éxo 21:9 »Si el amo entrega la muchacha a su hijo, deberá tratarla con todos los derechos de una hija.

Éxo 21:10 »Si toma como esposa a otra mujer, no podrá privar a su primera esposa de sus derechos conyugales, ni de alimentación y vestido.

Éxo 21:11 »Si no le provee esas tres cosas, la mujer podrá irse sin que se pague nada por ella.

Éxo 21:12

Injurias personales

»El que hiera a otro y lo mate será condenado a muerte.

Éxo 21:13 »Si el homicidio no fue intencional, pues ya estaba de Dios que ocurriera, el asesino podrá huir al lugar que yo designaré.

Éxo 21:14 »Si el homicidio es premeditado, el asesino será condenado a muerte aun cuando busque refugio en mi altar.

Éxo 21:15 »El que mate a su padre o a su madre será condenado a muerte.

Éxo 21:16 »El que secuestre a otro y lo venda, o al ser descubierto lo tenga aún en su poder, será condenado a muerte.

Éxo 21:17 »El que maldiga a su padre o a su madre será condenado a muerte.

Éxo 21:18 »Si en una riña alguien golpea a otro con una piedra, o con el puño,[b] y el herido no muere pero se ve obligado a guardar cama,

Éxo 21:19 el agresor deberá indemnizar al herido por daños y perjuicios. Sin embargo, quedará libre de culpa si el herido se levanta y puede caminar por sí mismo o con la ayuda de un bastón.

Éxo 21:20 »Si alguien golpea con un palo a su esclavo o a su esclava, y como resultado del golpe él o ella muere, su crimen será castigado.

Éxo 21:21 Pero si después de uno o dos días el esclavo se recupera, el agresor no será castigado porque el esclavo era de su propiedad.

Éxo 21:22 »Si en una riña los contendientes golpean a una mujer encinta, y la hacen abortar pero sin poner en peligro su vida, se les impondrá la multa que el marido de la mujer exija y que en justicia le corresponda.

Éxo 21:23 »Si se pone en peligro la vida de la mujer, ésta será la indemnización: vida por vida,

Éxo 21:24 ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie,

Éxo 21:25 quemadura por quemadura, golpe por golpe, herida por herida.

Éxo 21:26 »Si alguien golpea en el ojo a su esclavo o a su esclava, y se lo saca, en compensación por el ojo los pondrá en libertad.

Éxo 21:27 »Si alguien le rompe un diente a su esclavo o a su esclava, en compensación por el diente los pondrá en libertad.

Éxo 21:28 »Si un toro cornea y mata a un hombre o a una mujer, se matará al toro a pedradas y no se comerá su carne. En tal caso, no se hará responsable al dueño del toro.

Éxo 21:29 »Si el toro tiene la costumbre de cornear, se le matará a pedradas si llega a matar a un hombre o a una mujer. Si su dueño sabía de la costumbre del toro, pero no lo mantuvo sujeto, también será condenado a muerte.

Éxo 21:30 »Si a cambio de su vida se le exige algún pago, deberá pagarlo.

Éxo 21:31 »Esta misma ley se aplicará en caso de que el toro cornee a un muchacho o a una muchacha.

Éxo 21:32 »Si el toro cornea a un esclavo o a una esclava, el dueño del toro deberá pagarle treinta monedas[c] de plata al amo del esclavo o de la esclava. El toro será apedreado.

Leyes sobre indemnizaciones

Éxo 21:33 »Si alguien deja abierto un pozo, o cava un pozo y no lo tapa, y llegan a caerse en él un buey o un asno,

Éxo 21:34 el dueño del pozo indemnizará al dueño del animal, y podrá quedarse con el animal muerto.

Éxo 21:35 »Si un toro cornea a otro toro, y el toro corneado muere, se venderá el toro vivo, y los dos dueños se repartirán por partes iguales el dinero y el animal muerto.

Éxo 21:36 »Si el toro tenía la maña de cornear, y su dueño le conocía esta maña pero no lo mantuvo amarrado, tendrá que pagar por el animal muerto con un animal vivo, pero podrá quedarse con el animal muerto.

Salmo 23

Jehová es mi pastor

Sal 23:1

Salmo de David.

El SEÑOR es mi pastor, nada me falta;

Sal 23:2 en verdes pastos me hace descansar. Junto a tranquilas aguas me conduce;

Sal 23:3 me infunde nuevas fuerzas. Me guía por sendas de justicia por amor a su nombre.

Sal 23:4 Aun si voy por valles tenebrosos, no temo peligro alguno porque tú estás a mi lado; tu vara de pastor me reconforta.

Sal 23:5 Dispones ante mí un banquete en presencia de mis enemigos. Has ungido con perfume mi cabeza; has llenado mi copa a rebosar.

Sal 23:6 La bondad y el amor me seguirán todos los días de mi vida; y en la casa del SEÑOR habitaré para siempre.