Día 59

05 El Desierto

40 - 41 - 42 - 43 - 44 - 45 - 46 - 47 - 48 - 49 - 50 - 51 - 52 -53 - 54 - 55 - 56 - 57 - 58 - 59 - 60 - 61 - 62 - 63 - 64

Me’od - "Fuerza"

¿Qué significa amar a Dios "con todas tus fuerzas"? En esta última entrega de nuestros videos sobre el Shemá, exploramos la palabra hebrea detrás de esta frase. "Fuerza" es solo una de las muchas formas en que esta rica palabra puede ser traducida!

Deuteronomio 17

Deu 17:1 »No sacrificarás al SEÑOR tu Dios ninguna oveja ni buey que tenga algún defecto o imperfección, pues eso es abominable para el SEÑOR tu Dios.

Deu 17:2 »Puede ser que a algún hombre o mujer entre los tuyos, habitante de una de las ciudades que el SEÑOR tu Dios te dará, se le sorprenda haciendo lo malo a los ojos de Dios. Tal persona habrá violado el pacto

Deu 17:3 y desobedecido mi orden, al adorar a otros dioses e inclinarse ante ellos o ante el sol, la luna o las estrellas del cielo.

Deu 17:4 Tan pronto como lo sepas, deberás hacer una investigación escrupulosa. Si resulta verdad y se comprueba que algo tan abominable se ha cometido en Israel,

Deu 17:5 llevarás al culpable, sea hombre o mujer, fuera de las puertas de la ciudad, para que muera apedreado.

Deu 17:6 Por el testimonio de dos o tres testigos se podrá condenar a muerte a una persona, pero nunca por el testimonio de uno solo.

Deu 17:7 Los primeros en ejecutar el castigo serán los testigos, y luego todo el pueblo. Así extirparás el mal que esté en medio de ti.

Decisiones legales de sacerdotes y jueces

Deu 17:8

Los tribunales

»Si te enfrentas a casos demasiado difíciles de juzgar, tales como homicidios, pleitos, violencia y otros litigios que surjan en las ciudades, irás al lugar que el SEÑOR tu Dios elija

Deu 17:9 y te presentarás ante los sacerdotes levitas y ante el juez en funciones. Los consultarás, y ellos te darán el veredicto.

Deu 17:10 Actuarás conforme a la sentencia que ellos dicten en el lugar que el SEÑOR elija, y harás todo lo que te digan.

Deu 17:11 Procederás según las instrucciones que te den y el veredicto que pronuncien, y seguirás al pie de la letra todas sus decisiones.

Deu 17:12 El soberbio que muestre desacato al juez o al sacerdote en funciones, será condenado a muerte. Así extirparás de Israel el mal.

Deu 17:13 Todo el pueblo lo sabrá, y tendrá temor y dejará de ser altivo.

Leyes sobre los reyes de Israel

Deu 17:14

El rey

»Cuando tomes posesión de la tierra que te da el SEÑOR tu Dios, y te establezcas, si alguna vez dices: “Quiero tener sobre mí un rey que me gobierne, así como lo tienen todas las naciones que me rodean”,

Deu 17:15 asegúrate de nombrar como rey a uno de tu mismo pueblo, uno que el SEÑOR tu Dios elija. No aceptes como rey a ningún forastero ni extranjero.

Deu 17:16 »El rey no deberá adquirir gran cantidad de caballos, ni hacer que el pueblo vuelva a Egipto con el pretexto de aumentar su caballería, pues el SEÑOR te ha dicho: “No vuelvas más por ese camino.”

Deu 17:17 El rey no tomará para sí muchas mujeres, no sea que se extravíe su corazón, ni tampoco acumulará enormes cantidades de oro y plata.

Deu 17:18 »Cuando el rey tome posesión de su reino, ordenará que le hagan una copia del libro de la ley, que está al cuidado de los sacerdotes levitas.

Deu 17:19 Esta copia la tendrá siempre a su alcance y la leerá todos los días de su vida. Así aprenderá a temer al SEÑOR su Dios, cumplirá fielmente todas las palabras de esta ley y sus preceptos,

Deu 17:20 no se creerá superior a sus hermanos ni se apartará de la ley en el más mínimo detalle, y junto con su descendencia reinará por mucho tiempo sobre Israel.

Deuteronomio 18

Provisión para sacerdotes y levitas

Deu 18:1

Ofrendas para los sacerdotes levitas

»La tribu de Leví, a la que pertenecen los sacerdotes levitas, no tendrá patrimonio alguno en Israel. Vivirán de las ofrendas presentadas por fuego y de la herencia que corresponde al SEÑOR.

Deu 18:2 Los levitas no tendrán herencia entre sus hermanos; el SEÑOR mismo es su herencia, según les prometió.

Deu 18:3 »Cuando alguien del pueblo sacrifique un buey o un cordero, los sacerdotes tendrán derecho a la espaldilla, las quijadas y los intestinos.

Deu 18:4 También les darás las primicias de tu trigo, de tu vino y de tu aceite, así como la primera lana que esquiles de tus ovejas.

Deu 18:5 Porque el SEÑOR tu Dios los eligió a ellos y a su descendencia, de entre todas tus tribus, para que estuvieran siempre en su presencia, ministrando en su nombre.

Deu 18:6 »Si un levita que viva en alguna de las ciudades de Israel, respondiendo al impulso de su corazón se traslada al lugar que el SEÑOR haya elegido,

Deu 18:7 podrá ministrar en el nombre del SEÑOR su Dios como todos los otros levitas que sirvan allí, en la presencia del SEÑOR.

Deu 18:8 Recibirá los mismos beneficios que ellos, además de su patrimonio familiar.

Prácticas abominables

Deu 18:9

Costumbres abominables

»Cuando entres en la tierra que te da el SEÑOR tu Dios, no imites las costumbres abominables de esas naciones.

Deu 18:10 Nadie entre los tuyos deberá sacrificar a su hijo o hija en el fuego; ni practicar adivinación, brujería o hechicería;

Deu 18:11 ni hacer conjuros, servir de médium espiritista o consultar a los muertos.

Deu 18:12 Cualquiera que practique estas costumbres se hará abominable al SEÑOR, y por causa de ellas el SEÑOR tu Dios expulsará de tu presencia a esas naciones.

Deu 18:13 A los ojos del SEÑOR tu Dios serás irreprensible.

Deu 18:14

El profeta

»Las naciones cuyo territorio vas a poseer consultan a hechiceros y adivinos, pero a ti el SEÑOR tu Dios no te ha permitido hacer nada de eso.

Un nuevo profeta como Moisés

Deu 18:15 El SEÑOR tu Dios levantará de entre tus hermanos un profeta como yo. A él sí lo escucharás.

Deu 18:16 Eso fue lo que le pediste al SEÑOR tu Dios en Horeb, el día de la asamblea, cuando dijiste: “No quiero seguir escuchando la voz del SEÑOR mi Dios, ni volver a contemplar este enorme fuego, no sea que muera.”

Deu 18:17 »Y me dijo el SEÑOR: “Está bien lo que ellos dicen.

Deu 18:18 Por eso levantaré entre sus hermanos un profeta como tú; pondré mis palabras en su boca, y él les dirá todo lo que yo le mande.

Deu 18:19 Si alguien no presta oído a las palabras que el profeta proclame en mi nombre, yo mismo le pediré cuentas.

Deu 18:20 Pero el profeta que se atreva a hablar en mi nombre y diga algo que yo no le haya mandado decir, morirá. La misma suerte correrá el profeta que hable en nombre de otros dioses.”

Deu 18:21 »Tal vez te preguntes: “¿Cómo podré reconocer un mensaje que no provenga del SEÑOR?”

Deu 18:22 Si lo que el profeta proclame en nombre del SEÑOR no se cumple ni se realiza, será señal de que su mensaje no proviene del SEÑOR. Ese profeta habrá hablado con presunción. No le temas.

Deuteronomio 19

Leyes sobre las ciudades de refugio

Deu 19:1

Las ciudades de refugio

»Cuando el SEÑOR tu Dios haya destruido a las naciones cuyo territorio va a entregarte, y tú las hayas expulsado y te hayas establecido en sus ciudades y en sus casas,

Deu 19:2 apartarás tres ciudades centrales en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da en posesión.

Deu 19:3 Dividirás en tres partes la tierra que el SEÑOR tu Dios te da por herencia, y construirás caminos para que cualquiera que haya cometido un homicidio pueda ir a refugiarse en ellas.

Deu 19:4 »En cuanto al homicida que llegue allí a refugiarse, sólo se salvará el que haya matado a su prójimo sin premeditación ni rencor alguno.

Deu 19:5 Por ejemplo, si un hombre va con su prójimo al bosque a cortar leña, y al dar el hachazo para cortar un árbol el hierro se desprende y golpea a su prójimo y lo mata, tal hombre podrá refugiarse en una de esas ciudades y ponerse a salvo.

Deu 19:6 Es necesario evitar grandes distancias, para que el enfurecido vengador del delito de sangre no le dé alcance y lo mate; aquel hombre no merece la muerte, puesto que mató a su prójimo sin premeditación.

Deu 19:7 Por eso te ordeno apartar tres ciudades.

Deu 19:8 »Si el SEÑOR tu Dios extiende tu territorio, como se lo juró a tus antepasados, y te da toda la tierra que te prometió,

Deu 19:9 y si tú obedeces todos estos mandamientos que hoy te ordeno, y amas al SEÑOR tu Dios y andas siempre en sus caminos, entonces apartarás tres ciudades más.

Deu 19:10 De este modo no se derramará sangre inocente en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da por herencia, y tú no serás culpable de homicidio.

Deu 19:11 »Pero si un hombre odia a su prójimo y le prepara una emboscada, y lo asalta y lo mata, y luego busca refugio en una de esas ciudades,

Deu 19:12 los ancianos de su ciudad mandarán arrestarlo y lo entregarán al vengador para que lo mate.

Deu 19:13 No le tendrás lástima, porque así evitarás que Israel sea culpable de que se derrame sangre inocente, y a ti te irá bien.

Límites de la propiedad

Deu 19:14 »Cuando ocupes el territorio que el SEÑOR tu Dios te da como herencia, no reduzcas el límite de la propiedad de tu prójimo, que hace mucho tiempo le fue señalado.

Leyes sobre testigos

Deu 19:15

Los testigos requeridos

«Un solo testigo no bastará para condenar a un hombre acusado de cometer algún crimen o delito. Todo asunto se resolverá mediante el testimonio de dos o tres testigos.

Deu 19:16 »Si un testigo falso acusa a alguien de un crimen,

Deu 19:17 las dos personas involucradas en la disputa se presentarán ante el SEÑOR, en presencia de los sacerdotes y de los jueces que estén en funciones.

Deu 19:18 Los jueces harán una investigación minuciosa, y si comprueban que el testigo miente y que es falsa la declaración que ha dado contra su hermano,

Deu 19:19 entonces le harán a él lo mismo que se proponía hacerle a su hermano. Así extirparás el mal que haya en medio de ti.

Deu 19:20 Y cuando todos los demás oigan esto, tendrán temor y nunca más se hará semejante maldad en el país.

Deu 19:21 No le tengas consideración a nadie. Cobra vida por vida, ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, y pie por pie.

Deuteronomio 20

Leyes sobre la guerra

Deu 20:1

Instrucciones para la guerra

»Cuando salgas a pelear contra tus enemigos y veas un ejército superior al tuyo, con muchos caballos y carros de guerra, no les temas, porque el SEÑOR tu Dios, que te sacó de Egipto, estará contigo.

Deu 20:2 Cuando estés a punto de entrar en batalla, el sacerdote pasará al frente y exhortará al ejército

Deu 20:3 con estas palabras: “¡Escucha, Israel! Hoy vas a entrar en batalla contra tus enemigos. No te desanimes ni tengas miedo; no te acobardes ni te llenes de pavor ante ellos,

Deu 20:4 porque el SEÑOR tu Dios está contigo; él peleará en favor tuyo y te dará la victoria sobre tus enemigos.”

Deu 20:5 »Luego los oficiales le dirán al ejército: “Si alguno de ustedes ha construido una casa nueva y no la ha estrenado, que vuelva a su casa, no sea que muera en batalla y otro la estrene.

Deu 20:6 Y si alguno ha plantado una viña y no ha disfrutado de las uvas, que vuelva a su finca, no sea que muera en batalla y sea otro el que disfrute de ellas.

Deu 20:7 Y si alguno se ha comprometido con una mujer y no se ha casado, que regrese a su pueblo, no sea que muera en batalla y sea otro el que se case con ella.”

Deu 20:8 Y añadirán los oficiales: “Si alguno de ustedes es miedoso o cobarde, que vuelva a su casa, no sea que desanime también a sus hermanos.”

Deu 20:9 Cuando los oficiales hayan terminado de hablar, nombrarán capitanes que dirijan el ejército.

Deu 20:10 »Cuando te acerques a una ciudad para atacarla, hazle primero una oferta de paz.

Deu 20:11 Si acepta y abre las puertas, todos los habitantes de esa ciudad quedarán bajo tu dominio y serán tus esclavos.

Deu 20:12 Pero si la ciudad rechaza la paz y entra en batalla contra ti, la sitiarás;

Deu 20:13 y cuando el SEÑOR tu Dios la entregue en tus manos, matarás a filo de espada a todos sus hombres.

Deu 20:14 Como botín, podrás retener a las mujeres y a los niños, y el ganado y todo lo demás que haya en la ciudad. También podrás comer del botín de tus enemigos, que te entrega el SEÑOR tu Dios.

Deu 20:15 Así tratarás a todas las ciudades lejanas que no pertenezcan a las naciones vecinas.

Deu 20:16 »Sin embargo, en las ciudades de los pueblos que el SEÑOR tu Dios te da como herencia, no dejarás nada con vida.

Deu 20:17 Exterminarás del todo a hititas, amorreos, cananeos, ferezeos, heveos y jebuseos, tal como el SEÑOR tu Dios te lo ha mandado.

Deu 20:18 De lo contrario, ellos te enseñarán a hacer todas las cosas abominables que hacen para adorar a sus dioses, y pecarás contra el SEÑOR tu Dios.

Deu 20:19 »Si antes de conquistar una ciudad tienes que sitiarla por mucho tiempo, no derribes sus árboles a golpe de hacha, pues necesitarás alimentarte de sus frutos. No los derribes, pues no son hombres que puedan defenderse de ti sino sólo árboles del campo.

Deu 20:20 Sin embargo, podrás derribar los árboles que no sean frutales y construir con ellos instrumentos de asedio contra la ciudad que tengas sitiada, hasta que caiga bajo tu dominio.

Salmo 59

Líbrame de mis enemigos

Sal 59:1

Al director musical. Sígase la tonada de «No destruyas». Mictam de David, cuando Saúl había ordenado que vigilaran la casa de David con el propósito de matarlo.

Líbrame de mis enemigos, oh Dios; protégeme de los que me atacan.

Sal 59:2 Líbrame de los malhechores; sálvame de los asesinos.

Sal 59:3 ¡Mira cómo me acechan! Hombres crueles conspiran contra mí sin que yo, SEÑOR, haya delinquido ni pecado.

Sal 59:4 Presurosos se disponen a atacarme sin que yo haya cometido mal alguno. ¡Levántate y ven en mi ayuda! ¡Mira mi condición!

Sal 59:5 Tú, SEÑOR, eres el Dios Todopoderoso, ¡eres el Dios de Israel! ¡Despiértate y castiga a todas las naciones; no tengas compasión de esos viles traidores! Selah

Sal 59:6 Ellos vuelven por la noche, gruñendo como perros y acechando alrededor de la ciudad.

Sal 59:7 Echan espuma por la boca, lanzan espadas por sus fauces, y dicen: «¿Quién va a oírnos?»

Sal 59:8 Pero tú, SEÑOR, te burlas de ellos; te ríes de todas las naciones.

Sal 59:9 A ti, fortaleza mía, vuelvo los ojos, pues tú, oh Dios, eres mi protector.

Sal 59:10 Tú eres el Dios que me ama, e irás delante de mí para hacerme ver la derrota de mis enemigos.

Sal 59:11 Pero no los mates, para que mi pueblo no lo olvide. Zarandéalos con tu poder; ¡humíllalos! ¡Tú, Señor, eres nuestro escudo!

Sal 59:12 Por los pecados de su boca, por las palabras de sus labios, que caigan en la trampa de su orgullo. Por las maldiciones y mentiras que profieren,

Sal 59:13 consúmelos en tu enojo; ¡consúmelos hasta que dejen de existir! Así todos sabrán que Dios gobierna en Jacob, y hasta los confines de la tierra. Selah

Sal 59:14 Porque ellos vuelven por la noche, gruñendo como perros y acechando alrededor de la ciudad.

Sal 59:15 Van de un lado a otro buscando comida, y aúllan si no quedan satisfechos.

Sal 59:16 Pero yo le cantaré a tu poder, y por la mañana alabaré tu amor; porque tú eres mi protector, mi refugio en momentos de angustia.

Sal 59:17 A ti, fortaleza mía, te cantaré salmos, pues tú, oh Dios, eres mi protector. ¡Tú eres el Dios que me ama!